Sinopsis
Ice Age 3: el origen de los dinosaurios es la tercera entrega de la saga Ice Age, y en ella volvemos a encontrarnos con los personajes más populares y queridos por los espectadores, que siguen con sus líos y sus problemas varios, un tanto disparatados, pero muy, muy divertidos.
Scrat sigue a la búsqueda de su tan codiciada (y escurridiza) bellota, aunque en el camino quizá encuentre el verdadero amor. Manny y Ellie están esperando el nacimiento de su mini-mamut; mientras Sid, se ve envuelto en un lío tremendo, ya que de pronto se ve a cargo de una familia, después de encontrarse unos huevos de dinosaurio.
Diego, el tigre, empieza a pensar que se está volviendo "blando" por pasar tanto tiempo con sus amigos. La pandilla, con el objetivo de salvar a Sid, acaba adentrándose en un misterioso y desconocido mundo subterráneo, donde les esperan aventuras de lo más peligrosos e inesperadas. Desde enfrentamientos con algunos dinosaurios hasta luchas con una flora y una fauna que son de todo menos pacíficas. Allí, conocerán a Buck, una comadreja tuerta que se dedica, de forma implacable, a cazar dinosaurios.
Nuevos escenarios, un reto para los personajes
Esta película supone un cambio de escenario para los personajes, que dejan el mundo de hielo en el que habitan para adentrarse en otro muy distinto. Solo hay que ver los nombres de algunos de los lugares que visitan: Abismo de la muerte, Placas de la desdicha... En fin, que los guionistas han querido dar un paso más y llevar a los personajes a un nuevo entorno, con nuevas aventuras inesperadas. Y el resultado, al parecer, es muy bueno.
