

Andy Serkis nació en Ruislip Manor (Middlesex) y es descendiente de una familia de etnia Armenia aunque proveniente de Iraq. Estudió artes visuales y fue miembro de The County College.
A pesar de debutar en la televisión como actor en 1989 y en el cine en 1994, fue un verdadero desconocido hasta que en 2001 le llegó su gran oportunidad, cuando Peter Jackson le ofreció el papel de Gollum (y su personaje Hobbit, Sméagol) en la trilogía de la adaptación de El señor de los Anillos, de J.R.R. Tolkien.
Ese papel le lanzó a la fama y poco tiempo después de estrenar la primera de la saga, La comunidad del anillo, participó también en una película convertida en culto como 24 Hour Party People.
A partir de ese momento, su carrera ha ido subiendo, pero no como la espuma, que sube rápido hasta su punto máximo y luego baja, sino como el buen vino, que va mejorando con los años. Participó en diversas películas de más o menos repercusión para el público, hasta que volvió a generar el movimiento de otra criatura.
En 2005, Peter Jackson de nuevo, le ofreció crear los movimientos del simio gigante King Kong, en la revisión del clásico que hizo el director neozelandés, para más tarde seguir participando en películas de buena calidad pero de poca repercusión.
Será a partir de este año cuando la carrera de Serkis se puede relanzar de manera espectacular. Muy pronto, se estrenará la versión cinematográfica del reportero gráfico más famoso del mundo del cómic, Tintin, donde Andy Serkis interpretará al irreverente y malhablado Capitán Haddock, uno de los personajes más conocidos y queridos por los seguidores del cómic original.
Y algo más tarde, volverá al papel que le lanzó a la fama, volviendo a encarnar a Gollum en la adaptación de la precuela de El señor de los anillos, El Hobbit, donde aparecerá más como persona (Hobbit), en el papel de Sméagol que como Gollum en sí mismo.
Sin duda, estos dos papeles en dos grandes producciones van a devolver a Serkis a lo más alto, incluso se empieza a rumorear que su papel como Capitán Haddock podría convertirse en candidato a los Oscar en la edición correspondiente.
Padre de tres hijos con la también actriz Lorraine Ashbourne y vegetariano declarado (a pesar que se vio obligado a comer pescado durante el rodaje de las obras de Tolkien) le espera un momento en el que deberá decidir si quiere convertirse en un referente en el mundo de la actuación.
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