

Y es que Trueba ni siquiera había acabado el libro cuando ya lo estaba viendo convertido en una película, atraído por la historia pero sobretodo, por los tres personajes principales de la película, que le atraparon en seguida.
Y es que para Trueba, los personajes siempre son un punto muy importante de sus películas.
El director tuvo claro que sin duda, el mejor lugar para rodarla era Chile, conservando así los puntos geográficos que aparecen en la novela, con lo que la historia adquiría así un escenario real.
Pero si hay algo con lo que Trueba está satisfecho, es con los actores de la película, desde los protagonistas hasta los secundarios. Por cierto, que el propio Antonio Skármeta aparece en la película convertido en el personate del crítico que va a ver el baile de la Victoria.
Sinopsis
La película habla de un Chile en el que acaba de llegar la democracia. Con ella, una amnistía general para los presos sin delitos de sangre declarada por el presidente.
Es entonces cuando un joven Ángel Santiago (Abel Ayala) toma la decisión de vengarde de los duros y crueles abusos sexuales de los que ha sido víctima en la cárcel. Pero no es lo único a lo que dedica sus planes. Además, está tramando un robo, un plan realmente arriesgado y ambicioso, que no puede llevar a cabo solo.
Necesita la ayuda de Nicolás Vergara Grey (Ricardo Darín), un ladrón de bancos muy conocido, que intenta recuperar a su familia y escapar de su reputación. Pero las cosas se complican cuando entra en escena Victoria, una bailarina adolescente rodeada por un aire de misterio y que perdió a sus padres durante la dictadura de Pinochet.