

Tras cintas de gran éxito como "Amanecer de los muertos", "300", "Watchmen" o "Ga'Hoole, la leyenda de los guardianes", se esperaba mucho de la nueva película del director Zack Snyder, y la verdad es que no defrauda, especialmente a todos los seguidores de su cine, conocedores del dominio del cineasta para ofrecer películas con una estética particular y que suponen un espectáculo continuo por la gran presencia de efectos especiales, explosiones, luchas, enemigos singulares, así como unos personajes que parecen siempre salidos de un videojuego en comic. Ya nos hemos acostumbrado a nuestra dosis anual y sus películas son siempre ya de las más esperadas del año, tal como pasa con esta "Sucker Punch". Snyder nos ofrece una película, que envuelta en un curioso argumento, que mezcla la realidad con los sueños para crear un mundo realmente fascinante y en el que se mezclan personajes tan distantes y extraños como dragones, ninjas, chicas ligeras de ropa e incluso nazis, salidos de la mente del director y que no dejan de sorprender.
Además, Sucker Punch supone también la primera película del director en que se trata de un guión totalmente original, y no una adaptación, creado enteramente por el director, que nos demuestra de nuevo que es capaz de crear mundos e historias de fantasía como pocos. El guión, pese a su originalidad no deja de ser una mera escusa para ofrecernos una orgía de efectos especiales y mucha acción durante las casi dos horas que dura la película. Con una estética que recuerda a anteriores películas suyas como "300", nos ofrece una película que por momentos parece una encadenación de videoclips musicales, dónde se mezcla una rotunda banda sonora con unas escenas que consiguen una simbiosis perfecta entre acción, artes marciales, explosiones, cámaras lentas y demás artificios que llevarán al éxtasis al amante de este tipo de películas, que contará con el añadido de observar a las bellas chicas en acción. Como decíamos al principio, por momentos nos dará la sensación de estar viviendo a un videojuego, con los que guarda bastante similitudes.
En cuanto al elenco protagonista, destacan las cinco chicas que unirán sus fuerzas para sobrevivir en este increíble viaje: Emily Browning ("Presencias extrañas", "Una serie de catastróficas desdichas de Lemony Snickets"), Jena Malone ("Cold Mountain", "Orgullo y prejuicio", "Las ruinas"), Abbie Cornish ("Elizabeth: la edad de oro", "Ausente"), Vanessa Anne Hudgens ("High School Musical 3") y Jamie Chung. Especialmente destacable el papel de la protagonista, Emily Browning, y de Abbie Cornish que, aparte de su belleza, demuestran que son dos jóvenes promesas. También hay que destacar a la actriz Carla Gugino ("Noche en el museo", "Sin City", "La semilla del mal"), como una de las captoras y la presencia de Scott Glenn ("La caza del Octubre Rojo", "Llamaradas"), que aquí tiene un papel muy secundario pero que como siempre de calidad.


La película cuenta la historia de Babydoll, una chica que tras la muerte de su madre es encerrada contra su voluntad en un psiquiátrico. Sin embargo, no ha perdido el deseo de vivir, por lo que decide unirse a otras cuatro chicas - la decidida Rocket, la astuta Blondie, la implacablemente leal Amber y la reacia Sweet Pea - para lograr escapar de su destino y buscar sobrevivir, intentando escapar de sus captores, Blue, Madam Gorski y High Roller. Dirigidas por Babydoll, las cinco chicas vivirán, a través de su mente, una aventura épica y un combate fantástico contra samurais, serpientes o dragones y con un arsenal virtual a su disposición. Deberán decidir lo que están dispuestas a sacrificar para permanecer vivas. Pero con la ayuda de un Hombre Sabio su increíble viaje - si lo consiguen - las liberará.
Tras este curioso argumento que mezcla realidad con los sueños y la fantasía, "Sucker Punch" nos ofrece un soberbio espectáculo audiovisual, siempre teniendo en cuenta que no le podemos pedir mucho al guión, ni a su historia que no tienen mucho desarrollo, aunque tampoco lo pretende. Lo que busca es divertir al espectador y lo consigue con una película que no da casi respiro. Zack Snyder nos vuelve a ofrecer una película distinta y que supone un gran ejemplo de cine de palomitas del bueno. Muy recomendable.
muy acertada la crítica, estoy de acuerdo que es espectacular, aunque eso sí, en efecto, el argumento es surrealista