

Sin la ola de polémicas que había generado el anterior film “El código Da Vinci”, llega esta nueva película que mantiene la acción de la versión literaria.
Una adaptación sin duda, difícil de llevar al cine, con historias colmadas de misterios que Dan Brown llena de información.
El guionista esta vez, se ha tomado más libertades con el fin de mejorar el ritmo y omitió a varios personajes que algunos pueden considerar claves.
Los que no leyeron las novelas pero sí han visto mucho cine, caerán inevitablemente en varias trampas ya que la trama da giros inesperados sin cesar.
En esta parte, el simbolista Robert Langdon, se ve envuelto en medio de una rivalidad que tiene muchos años de antigüedad. También vuelve a enfrentarse a las sólidas estructuras de la Religión y la Ciencia cuestionando al Vaticano.
Comienza así la investigación y el mismo deberá encargarse de descifrar y seguir las pistas dejadas en toda Roma, embarcándose en una carrera contra el tiempo ya que debe evitar que cuatro cardenales sean asesinados y que una bomba sea detonada.
Los complots se superponen y Langdon trata de explicar los fenómenos, de forma un poco presurosa para nuestro gusto, acompañado de una física (Vittoria Vetra)
Al acercarse el desenlace de la historia, el film pierde un poco de ritmo pero sigue siendo bastante emocionante y sorpresiva la trama, que con excelentes actuaciones promete entretener al espectador.
No hablamos de uno de los mejores trabajos del director, pero es un producto muy bien logrado para un público sin prejuicios.
Director: Ron Howard
Protagonizada por: Tom Hanks, Ewan McGregor, Ayelet Zurer, Stellan Skarsgard, Pierfrancesco Favino, Nikolaj Lie Kaas, Armin Mueller-Stahl
Duración: 138 minutos